Verba volant, scripta manent

martes, 25 de diciembre de 2012

Discursos más cortos, por favor


                          William Henry Harrison (1773-1841)

William Henry Harrison fué elegido en diciembre de 1840 como el 9º presidente de los Estados Unidos. Candidato del partido whig, era un político muy popular por sus méritos militares durante las Guerras Indias y la guerra anglonorteamericana de 1812-1815. Unos méritos que contribuían a disimular su avanzada edad: con 68 años, fué el último presidente nacido antes de la Declaración de Independencia (1776) y el de más edad hasta aquel momento (aún hoy sería el primero si Ronald Reagan no hubiera sido elegido en 1981 para su primer mandato con 69).
Harrison asumió el cargo el 4 de marzo de 1841. Un día, según las crónicas, extremadamente frío y húmedo. Aún así Harrison pronunció su discurso de investidura al aire libre. Y lo hizo sin llevar abrigo, guantes ni sombrero. Si al menos hubiese sido un discurso breve... Pero Harrison no destacaba por su concisión, precisamente. Su alocución se convirtió en el discurso de aceptación más largo jamás pronunciado por presidente alguno: un total de 8445 palabras, con citas clásicas y referencias al Imperio Romano. Le llevó una hora y tres cuartos terminarlo. Y eso gracias a que su amigo el senador Daniel Webster, al que nombró secretario de estado, lo había revisado y aligerado notablemente.
Por si no fuera poco, Harrison disfrutó además del correspondiente desfile por las calles de Washington y asistió a tres bailes esa misma noche. Su salud quedó bastante debilitada y el 26 de marzo se le diagnosticaba un fuerte resfriado que se fué agravando y desembocó en neumonía, muriendo el 4 de abril. Otros dos records para su historial: ser el primer presidente que fallecía ostentando el cargo y la presidencia más breve de la historia, un mes exacto.
Así que ya sabeis: si teneis que dar un discurso, que sea breve y, a poder ser, cerca de una estufa.



           Веселое рождество все

No hay comentarios:

Publicar un comentario